Los primero pasos de un bebé son un acontecimiento importante que marcarán un antes y un después en su vida. El bebé empezará a tener mayor libertad y su curiosidad por conocer el entorno que le rodea se disparará. Sin embargo, muchas veces los padres tienden a preocuparse cuando notan que a su hijo le cuesta más aprender ésta acción, llegando, y sin darse cuenta a forzar este aprendizaje cuando ven que su bebé no anda o le cuesta más que al resto.
Existe una edad media en la que, por lo general, los bebés empiezan a dar sus primeros pasos y suele ser alrededor de los 11 meses. No obstante, esta edad es solo una referencia, ya que cada niño es diferente y no existe una edad determinada para que el bebé empiece a caminar.Estos pueden empezar a andar antes o incluso más tarde, con 12 o 13 meses de edad.
¿El bebé debe gatear antes de andar?, es otra de las cuestiones que más preocupan o desorientan a los padres cuando ven que su hijo no gatea y empieza a andar directamente. Que el bebé gatee antes de andar muestra que está siguiendo un orden lógico en su desarrollo psicomotriz, primero reptan, después gatean y finalmente caminan. Pero si el bebé va teniendo un desarrollo correcto y se salta el paso de gatear para empezar a andar directamente, no pasa nada.
Por lo tanto no existe una edad concreta en la que se deba estimular a los bebés, cada uno tienen su propio ritmo de desarrollo. Es necesario que los padres presten atención a las señales que indiquen que su hijo quiere comenzar a andar, y cuando estas aparezcan, es el momento de iniciar la estimulación. Si esa empieza antes de que el cuerpo del bebé este preparado, pueden surgir algunos problemas o incomodidades en el niño debido a que su estructura corporal no está preparada.
¿Cómo podemos estimular al bebé?, a continuación te contamos sobre algunas estimulaciones que se pueden llevar a cabo:
Para que el pequeño empiece a poner de pie sin apoyos, puedes colocar su juguete favorito encima de un banco de poca altura o una caja, de esta manera se incita al niño a que se arrodille para ver por encima del banco caja y luego se ponga de pie para alcanzar el juguete.
Deja que el bebé se apoye en un lugar firme, como una cama o una silla, y llama su atención con un juguete o algún objeto que le guste, y a medida que va dando pasos, se ha de animar al pequeño.
Cuando el bebé sabe andar apoyándose en los muebles se puede empezar a llevarlo de la mano o, más adelante, llevarlo con un pañuelo grande que rodee su abdomen y pase por debajo de los brazos esto hará que el pequeño se sienta con mayor libertad.
Finalmente, y Sirviéndote de un pequeño cajón lleno de juguetes fácil de abrir y a la altura del bebé, puedes estimularle a ponerse de pie para abrirlo. No olvides tomar medida de seguridad como colocar una traba de goma para que el cajón no se cierre totalmente y de este modo evitar que el bebé pueda lastimarse.
Preferentemente, durante sus primeros pasos no es necesario que lleve zapatos, ya que estos pueden entorpecer al pequeño llegando incluso a dificultar en gran medida la labor de andar.
Es importante que se celebre con alegría y cumplidos cada pequeño gesto o paso del bebé, ya que así conseguiremos reforzar su confianza y con ello su seguridad para enfrentarse a este nuevo reto.