Cada día aumentan más los casos de depresión hasta el punto de que está enfermedad llega a afectar a más de 350 millones de personas en todo el mundo. Por este motivo, en la actualidad la felicidad ha pasado a ser un estado del que solo unos pocos saben o pueden disfrutar al 100%.
La felicidad se define como un estado mental que se alcanza cuando la persona consigue la mete que se propone y supone una satisfacción; y según Pratt y Lambrou existen cuatro pasos para poder lograr el camino hasta esta meta.
El primero de ellos es identificar, es decir, saber las cosas que te perturban o que no te hace feliz. En esta primera acción debemos realizar una lista con los factores que pueden tener un impacto negativo en nosotros. Las personas que saben identificar el problema obtienen la solución.
El segundo paso es borrar; esto te ayudará a equilibrar el sistema de energía corporal. Se lleva a cabo a través de ejercicios físicos.
El tercer paso consiste en remodelar y hay que liberar esas creencias o acciones que son negativas para nosotros. En este paso se intenta dominar el entorno y encontrar las mejores soluciones para llegar a la felicidad. Para ello hay que preguntarse qué hemos hecho mal y pensar cuales serían las mejores decisiones y acciones que tenemos que tomar para llegar a nuestra meta: la felicidad.
Por último, el cuarto paso es anclar. Consiste en poner en marcha tus pensamientos, fortalecer las creencias y buscar soluciones.
Si prefieres seguir otras opciones distintas a las mencionadas anteriormente, aquí te dejamos unos consejos que irán muy bien para conseguir tu objetivo. Ser agradecido –dar gracias por todo lo que tienes, no solo bienes materiales-, no buscar el reconocimiento de los demás porque tú eres tu propia motivación, ser generoso, agradecer los mejores momentos, decide tener buena actitud, disfruta de tu trabajo y permítete el fracaso –al fin y al cabo es una buena forma de aprender-. Por último recuerda que: “si no crees que puedes logarlo, nunca lo harás”, así que cree en ti mismo.
