Infiltración de sacroiliacas
Esta técnica consiste en la introducción de un medicamento (anestésico local y/o un corticoide) en unas articulaciones grandes situadas entre el sacro (el final de la columna) y las palas ilíacas (huesos de la pelvis) para tratar dolores de carácter mecánico con este origen.
El bloqueo puede ser diagnóstico con anestésico local y efecto pasajero (para localizar el origen del dolor), o terapéutico con un esteroide y de mayor duración (para tratamiento del dolor) Suele durar entre 10 y 15 minutos.
Es una técnica poco dolorosa, pero un poco incómoda. Se realiza con el paciente tumbado boca abajo y se emplea una aguja dirigida con ecografía para localizar el lugar de inyección.
Control del dolor y disminución de la toma de analgésicos.
La pretensión terapéutica es la de aliviar su dolor, no curar. Facilitar una mejora de su funcionalidad, la rehabilitación y fisioterapia, y de esta manera procurar una mayor percepción de su calidad de vida. Debe saber que el grado de alivio es muy variable de un paciente a otro.
Conociendo la naturaleza de ese dolor sacroilíaco, sabemos que esa técnica es muy eficaz, dependiendo del origen del dolor.
Es muy notable en los cuadros de dolor agudos derivados de esfuerzos físicos excesivos de repetición en trabajos duros, y un poco menos espectaculares en dolores de origen achacable al desgaste por la edad y/o por enfermedades reumáticas.
PARA QUIÉN ESTÁ INDICADO
Especialmente indicado en aquellos dolores irradiados que se proyecta desde la zona lumbar baja a los glúteos y los isquiotibiales hasta la cara posterior de la rodilla.
PROFESIONAL QUE REALIZA LA SESIÓN
Todas las sesiones de infiltración son realizadas por nuestro cuerpo médico especializado en anestesiología.
